Es muy común que queramos que nuestros hijos reciban la mejor educación y preparación en todos los aspectos para su futuro.
Aprender inglés hoy en día es algo fundamental por lo que siempre optamos por buscar una buena escuela en donde cuenten con un buen nivel de inglés y en caso de que no veamos los resultados que deseamos buscamos una nueva opción externa. Pero ¿Hacer que nuestros hijos tomen clases adicionales a las que reciben en la escuela es buena idea?
Cuando buscamos una escuela para nuestros hijos probablemente una de las primeras cosas en las que nos fijemos es en que enseñen inglés a sus estudiantes, sin darle mucha importancia a su modelo educativo y métodos de enseñanza. Como resultado, terminamos inscribiendo a los niños en escuelas bilingües esperando que obtengan un nivel de inglés alto rápidamente y al no obtener los resultados que esperamos recurrimos a programas externos como Open English esperando que esto levante su nivel.
Si bien estos programas pueden ser de ayuda para ellos, también pueden resultar contraproducentes para los niños, ya que si ya están tomando clases de inglés durante las mañanas en su escuela, tener que hacerlo nuevamente en las tardes puede ser tedioso.
Esto puede ser debido a diferentes factores, entre los cuales los principales son:
Debido a que los métodos de enseñanza de ambas escuelas son diferentes, es posible que alguno de los dos, o incluso ambos, no funcionen correctamente para la manera de aprender de nuestros hijos. Esto podría provocar que en lugar de estar ayudando a nuestros hijos lo estén perjudicando, ya que no solo no estarán aprendiendo en la escuela, sino que el tiempo invertido en sus tardes también será en vano.
Por otro lado, sí los temas revisados en ambas escuelas no están en sincronía, será muy confuso para los niños, ya que empezaran a revolver la información que reciben en las mañanas con la de las tardes y se saturarán de información que no está siendo de utilidad para ellos.
De igual manera, cuando los temas vistos en clase durante ambos turnos son distintos provocan que los niños se confundan, además de que en cierto punto revisaran la misma información 2 veces bajo diferentes métodos de enseñanza, lo que los confundirá aún más.
Por último, el ser obligados a tomar clases en las tardes sobre una materia que ya revisan en las mañanas puede provocar que sea más pesado para ellos y de esta manera empiecen a ver aprender inglés como algo negativo y su mente se cierre a continuar aprendiendo.
Esto comúnmente es debido a que la escuela no cuenta con un modelo educativo efectivo. Ya que las escuelas bilingües únicamente enseñan el idioma como parte de una materia que se imparte un número limitado de horas a la semana. Los niños lo ven como una materia más y al practicarlo junto a otras materias como matemáticas, creen que aprender inglés se encuentra entre las menos importantes y no la toman en serio o no le dan una prioridad alta.
Además, en algunas ocasiones, las horas semanales dedicadas a la materia no son las suficientes para que nuestros hijos puedan interactuar con el idioma de manera que resulte en un proceso efectivo.
El problema no es inscribir a nuestros hijos en escuelas con modelos educativos bilingües, sino que lo hacemos sin saber que existe una mejor opción: los modelos biculturales.
En un modelo bicultural no solo se estudia el inglés como una materia, la mayoría de ellas son impartidas completamente en inglés. De esta manera los niños están constantemente expuestos al idioma, lo que ayuda a que tengan más práctica y se acostumbren mejor a él. Además de que así pueden comprender la importancia que tiene, pues lo ven aplicado a situaciones de la vida real.
La mejor manera de dominar un idioma es la práctica constante y con un modelo bicultural nuestros hijos viven lo más parecido a una experiencia en el extranjero, teniendo interacción constante con el idioma y poniéndolo a prueba regularmente. Los programas biculturales a menudo cuentan con convenios con otras escuelas alrededor del mundo, dándole a sus alumnos la oportunidad de vivir una experiencia en el extranjero que no solo les ayuda a practicar su segundo idioma, pero también les brinda una nueva perspectiva cultural del mundo.
En el Colegio Washington contamos con un modelo educativo bicultural desde kínder hasta secundaria, asegurándonos de que nuestros alumnos cuenten con un excelente nivel de inglés. Además, utilizamos herramientas digitales para mejorar su proceso de aprendizaje, a través un método innovador efectivo que hace que los niños se diviertan y disfruten mientras aprenden, lo cual perfecciona su educación.
Si quieres conocer más sobre cómo escoger la escuela ideal para tus hijos, da clic en el siguiente botón para conocer nuestro Modelo Educativo Washington y empieza a trazar el camino de un buen futuro para tus hijos.